
Los frontones en el País Vasco históricamente han sido mucho más que una instalación para practicar deporte. El frontón, dentro de su sencillez arquitectónica (dos paredes) es el gran protagonista de la plaza de los pueblos, conformándola junto con el ayuntamiento y la iglesia.
El frontón, con su humilde volumen y su sencillo diseño, tiene un mayor peso social que las otras dos construcciones de referencia. Ante la representatividad del poder político del ayuntamiento, y del poder moral/religioso de la iglesia, el frontón es el gran representante del poder popular en la plaza del pueblo. Es un espacio de ocio libre, en contraposición a los otros dos espacios de orden y poder. El alcalde receloso en el balcón del ayuntamiento y el párroco irritado desde las escaleras de la iglesia, observan cómo la gente del pueblo habla, juega y se divierte en el frontón.
El frontón es el espacio multifunción por antonomasia. En el frontón, además del juego de pelota, se celebran importantes eventos sociales para la localidad como ferias, mercados, bailes populares, juegos de todo tipo, bodas, exposiciones culturales… Es punto de encuentro y espacio lúdico de actividades muy diferentes al juego de pelota. Ese frontON es más que una instalación deportiva, es un espacio público de referencia para la vida social del pueblo.
Pero desde las áreas de deporte de muchos pueblos del País Vasco se olvidaron de este carácter social del frontON y lo consideraron otra instalación deportiva más. En el frontON pasaban muchas cosas, demasiadas. Era necesario gestionar esa amalgama de usos dejando claro que el deporte era su finalidad principal y que una buena gestión de este “equipamiento” dotara de una mayor seguridad para quienes quisieran practicar el deporte de la pelota vasca.
La primera medida fue una cuestión estética. A comienzo de la década de 1990 algunos grandes frontones comenzaron a pintarse de verde para mejorar la visibilidad en las retransmisiones televisadas de pelota vasca profesional. Tras estos, muchos frontones abiertos, que jamás acogerán la retransmisión televisada de un partido, sufrieron capas y capas de pintura verde que taparon magníficas paredes de piedra autóctona maravillosa. Ese color verde dejaba bien a las claras que eso era una instalación deportiva y cuáles serían las prioridades a la hora de ser utilizado.
Poco a poco, en esa búsqueda de la seguridad y de una gestión eficiente se fueron incorporando elementos y medidas de gestión de la seguridad en instalaciones deportivas como las descritas en los útlimos post: un vallado perimetral, un sistema de reserva de horas, un torno para el control de accesos. El frontON perdió la mayor parte de su componente popular y dejó de ser ese lugar de encuentro y socialización. Finalmente lo consiguieron, convirtieron el frontON en un frontOFF.
Con este juego de palabras con el espacio deportivo de libre acceso arquetípico del País Vasco (Aldaz, Vozmediano y San Juan, 2015) trato de explicar la necesidad de comprender muy bien las dinámicas de los espacios públicos antes de comenzar a implantar estrategias para su seguridad y dinamización. Muchas de las estrategias que implantamos en los equipamientos deportivos convencionales no son válidas para los espacios públicos ya que dejan fuera su dimensión social.
A partir de las teorías aquí explicadas se han desarrollado diferentes estrategias relacionadas con la vigilancia natural, el aumento de la territorialidad, la promoción de las relaciones comunitarias o la protección del objeto del delito. Sin embargo, debemos ser conscientes de que estas estrategias pueden ser incompatibles entre sí y que todas ellas tienen sus puntos fuertes y puntos débiles. Las características del entorno físico y del entorno social en el que deben ser aplicadas marcarán cuáles son aconsejables y cuáles no.
En definitiva, las estrategias de seguridad y deporte en el espacio público deberán buscar ese equilibrio entre funcionalidad deportiva y carácter social, adecuándose a cada contexto específico.
Reconocimiento: Es obligado reconocer a Juan Aldaz la autoría del juego de palabras FrontON-FrontOFF. En una comida en la cafetería de la universidad estuvimos hablando sobre el efecto de los modelos de gestión de los espacios deportivos abiertos y el cambio profundo en el simbolismo del frontón en nuestros pueblos.Con esta idea, Juan hizo una genial conferencia de cierre de los X Encuentros de Políticas Deportivas en los Municipios 2015 (IRUN-GIPUZKOA) y la articuló a partir de este juego de palabras. Desde entonces vamos desvariando.
Fin de la serie LOS OJOS Y LAS ZAPATILLAS DE LA CALLE. SEGURIDAD Y DEPORTE EN EL ESPACIO PÚBLICO
- Los ojos y las zapatillas de la calle
- Ciudades Activas y maleantes
- Deporte en el espacio público, ¿seguridad o incivismo?
- Diseño urbano para la seguridad del deporte
- Espacio deportivo defendible
- Ventanas rotas
- Del FrontON al FrontOFF, equilibrio y contexto
Aldaz, J.; Vozmediano, L. y San Juan, C. (2015) ¿Son los espacios urbanos deportivos de libre acceso lugares FrontON o lugares FrontOFF?. En International e-Journal of Criminal Science, Artículo 4, Número 9 (2015)
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